Nicolas y Worick regentan un negocio en el que aceptan todo tipo de encargos, desde reparto de mercancía hasta asesinatos, en Ergastulum, un pueblo dominado por la mafia.
Tanto la policía como los capos de la mafia reconocen su superioridad, especialmente en el caso de Nicolas, un Twilight, que gracias a cierta droga adquiere una fuerza sobrehumana que le ayuda a resolver los asuntos más turbios.