Para proteger a Tetsurô de la compañía Berühren, a Jûzô no le queda más remedio que pedirle al joven que apriete el gatillo que tiene en la cabeza. Aunque es el único modo de huir de la corporación que controla ciudad, el ejecutor incurre en una violación de las leyes para Extended, por lo que Agencia de Reconstrucción lo apresa. ¿Será vendido por piezas al desguace?