Mientras Cassandra se dispone a mover ficha, Diana se enfrenta al Primogénito en Londres con la ayuda de dos aliados indispensables. El primero es Orión, el hijo de Darkseid, el guerrero más poderoso del remoto planeta Nueva Génesis. El segundo es Ares, el dios de la guerra, su mentor desde que era niña en Isla Paraíso. La batalla tendrá gravísimas consecuencias a medio plazo… y no es más que un nuevo episodio de la cruenta guerra por el trono del Olimpo.